Este ha sido el primer viaje de este 2023. Girona es un lugar conocido para nosotros, y teníamos este viaje hace tiempo en el punto de mira. Este recorrido combina una de las vías verdes más chulas, la del Carrilet, con las comarcas del Empordà y la Garrotxa, dos lugares con paisajes mágicos. Y todo ello se corona con el paso por alguno de los pueblos más chulos de la costa Brava.
CUANDO HACER LA RUTA
Menos en invierno, se puede hacer en cualquier época del año. Nosotros la tuvimos que aplazar en tres ocasiones por fuertes previsiones de lluvia en primavera. Al final nos cuadró hacerla la última semana de Junio en plena ola de calor. Pero que el clima es bastante benigno todo el año. Eso si, en la zona del Empordà no dejes de vigilar la Tramontana, viento del norte que puede ser potente.
COMO HACER LA RUTA
Esta ruta me resultaba familiar de haber hecho ya diferentes tramos. Pero el recorrido exacto lo sacamos de aquí. Esta ruta vendría a ser una alternativa light a la Pirinexus, puesto que emplea muchos de sus tramos, pero evita cruzar los Pirineos. Por eso el desnivel acumulado de esta ruta es casi la mitad, y más adecuado para gente que no está muy fuerte. Como puedes ver la hicimos saliendo de Girona, en sentido contrario a las agujas del reloj.
RUTA CIRCULAR POR LA GARROTXA
La ruta es circular y nosotros la planteamos en 4 días. En todo caso en Girona muchas empresas hacen transfers, por si te tienen que llevar el equipaje o las bicis. El alojamiento tampoco es un problema, porque salvo en la tercera etapa, hay oferta de sobra. Nosotros como otras veces lo planteamos en modo tienda campaña. En todo caso, de Girona a Figueres hay conexión de cercanías. Y desde Girona a Barcelona se puede llegar con la bici en el tren.
La ruta por la Garrotxa combina vía verde, asfalto y buenos caminos de tierra. Aunque hay un tramo un poco mtb para llegar a Banyoles. Lo mejor es una gravel o bici con rueda MTB. Si llueve imprescindible guardabarros.
1 GIRONA-PALS
Girona es un encanto que no te puedes perder su visita. Nosotros lo hicimos la tarde del día que llegamos. No era mucho, pero ya habíamos estado. Un buen punto de partida es el Parc del Migdia donde se puede aparcar a la sombra sin problemas. Desde allí es fácil encontrar la ruta del Carrilet que cruza la ciudad.
Pronto vimos que el firme de la via verde era bueno, de tierra prensada. Eso y el desnivel a favor nos permitía un buen ritmo. Pero bueno, en cada fuente parábamos para sofocar el tremendo calor. Hasta llegar a Sant Feliu la vía verde del Carrilet está muy cuidada, y equipada, así que hidratarnos no era el problema.
En platja d´Aro y en Palamós aprovechando dos zonas de sombra a la orilla del mar, hicimos dos paradas largas para engañar al sol, y darnos bañitos en la playa. Ya por la tarde, estiramos hasta el camping de Pals, por la vía verde del tren Petit, donde hicimos noche. Pero antes dimos una vuelta por el precioso pueblo Medieval de Pals.
2 PALS-FIGUERES
Empezamos pronto la jornada para evitar el calor. Pero con la luz de la mañana, el paisaje del Baix Empordà daba su mejor color. Campos ocres de cereales, de amarillos girasoles, y de verde, mucho verde. Y las masías monumentales daban un toque añejo a este paisaje que tanto recuerda a la Toscana.
Volvimos de nuevo la costa, en l´Escala donde paramos a almorzar y reponer fuerzas. Siguiendo nuestro camino pasamos por uno de los lugares más chulos de la ruta: el tramo entre pinos que pasa por delante del yacimiento de Empuries, lugar por donde los romanos comenzaron la colonización de la Hispania.
Tras cruzar el Fluvià bordeamos el parque natural del aiguamolls del Empordà, un humedal de champions legaue. Nos llamó la atención como cigüeñas iban picoteando entre los arrozales. Llegamos relativamente pronto a Figueres, y decidimos quedarnos a dormir de hostal, porque faltaba bastante hasta el siguiente camping. En Figueres fuimos siguiendo las pistas de Dalí que hay por la ciudad.
3 FIGUERES-SANTA PAU
Dejamos Figueres en un entorno de extrarradio pero pronto encontramos un camino muy chulo entre bosquecillos y campos de cereales. Cerca de Esponella dejamos una carretera comarcal y pillamos una subidita que nos hizo poner pie a tierra. Por desnivel y lo roto que estaba el camino. Y el calor sofocante no ayudó.
Ya de vuelta a la GIV-5122 llegamos a Banyoles donde rodeamos el estanque gracias a un camino que lo bordea. Un lugar muy chulo donde parar y darse un chapuzón. Ya el resto del día íbamos a circular por la carretera GI-524 lo que ayudó a superar las rampas que íbamos a comernos esa tarde de calor. Esta fue la etapa en la que pillamos más subidas, y en la que debes tener piernas.
En esta zona hay muy pocas poblaciones y son diminutas. Nosotros paramos en el santuari del Colell, que estaba lleno de escolares, y tenía un bar. Y encima la fuente soltaba agua fresquita. Tras un descanso tiramos hasta Santa Pau, donde no te puedes perder la visita del pueblo medieval. Allí había un camping, pero decidimos tirar hasta la Fageda d´en Jordà rodando en ligera bajada. Acampamos en el camping Fageda, en pleno esplendor de la Garrotxa. Zona volcánica donde la vegetación es exuberante.
4 OLOT-GIRONA
Tras el potente desnivel de la etapa anterior, este tramo se planteaba por la vía verde del carrilet y con desnivel a favor. También ayudó que el cielo estaba muy nublado y las temperaturas bajaron unos cuantos grados. Desde el camping en una trepidante bajada llegamos a Olot donde pillamos la vía verde. Aquí las altas montañas y muy verdes de la garrotxa nos regalaban las postales más chulas del viaje.
Superamos el Coll d´en Bas, y desde allí una ligera y constante bajada nos llevaba en volandas, por una de las vías verdes más chulas. Paramos en Sant Feliu de Pallerols, donde el río Brugent forma unos rincones preciosos. Antes de llegar a Amer está la font Picant donde brota el agua con gas, con un sabor muy especial. En Amer salió el sol y el paisaje empezó a perder un poco de encanto al rodar cerca de carretera. Habían ya ganas de llegar.
Puede que por eso tras cruzar el puente de la ap-7 nos despistamos y entramos por Pals, a Girona en vez de la orilla del Ter y el Parc de la Devesa. Pero estábamos contentos por terminar enteros un viaje tan chulo.
Girona tiene el encanto de muchos paisajes que solo hemos visto en Francia. Pero que tienes de todo, montaña, costa y muchas rutas de poco desnivel. Y otras para darse fuego a las piernas. Por eso es un destino ciclista top, a nivel europeo. En todo caso, si te quedan dudas sobre esta ruta por la Garrotxa, no dejes de mandar un mail.