Después de nuestro viaje circular por Euskadi y Navarra, no era plan de volver tan pronto a casita, en Castellón. Por eso dedicar unos días a pedalear por Vitoria y alrededores era una propuesta potente y sugerente. La verdad es que el abanico de posibilidades ciclistas en esta ciudad es grande, con lo que no defraudará.
Ya tenía referencias de lo bien que se han hecho las cosas urbanísticamente en Vitoria para que la movilidad sostenible sea fácil. En el 2012 fue capital verde europea, y en el 2019 declarada «global green city» por la ONU. Moverse en bici por la ciudad es sencillo. Pero además para alguien de lejos como yo, el anillo verde que rodea la ciudad era otro potente imán. Ese anillo lo forma un conjunto de bosques y parques enlazados por una vía que es un espacio perfecto para pedalear, caminar o hacer deporte. Luego indagando más, vi el resto de abanico de posibilidades cicloturistas, y te cuento algunas de las que hicimos.
TURISMO EN BICI POR VITORIA
El primer día como llegamos por la tarde, lo dedicamos a asentarnos en nuestra base, el camping de Vitoria. Está un poco lejos del centro (5 km), pero en bici era fácil y agradable de llegar. Además casi todo era carril bici. Las afueras de Vitoria son amplias avenidas, llenas de bloques de pisos con formas modernas y de colores. Y todo entre verdes y generosos parques. Sin darnos cuenta nos plantamos frente a Mendizorroza, y como somos muy futboleros nos hicimos una batería de fotos importante.
Llegando al parque de la Florida, vimos las casas centenarias y palacetes, que daban el toque de elegancia y abolengo de Vitoria. De ahí a la catedral, y la plaza de la Virgen Blanca solo había un paso. Que bonito ver gente moviéndose en bici por todas partes, y parkings abarrotados de bicicletas. Ya sin un rumbo fijo estuvimos callejeando por el centro, y luego nos sentamos a picar algo.
Cuando visitamos una ciudad más que llevar un recorrido programado preferimos dejarnos llevar de forma errática. Es una buena forma de sentir el palpitar de la vida en ese lugar.
EMBALSE DE ULIBARRI GAMBOA
Este es un embalse bastante majo que se encuentra al norte de la ciudad, y que tiene una senda ciclable que lo rodea. Para llegar teníamos un tramo de la vía verde del tren vasco navarro. No fue fácil encontrar el camino cerca de Gamarra menor, pero una vez localizado el camino iba recto como una flecha hasta el pantano de Ulibarri Gamboa. Llegados a Landa, almorzamos en la terraza que había para tomar fuerzas.
Por un despiste comenzamos a dar la vuelta en el sentido contrario a las agujas del reloj, y fue tarde cuando me di cuenta. Pronto pude sacar unas preciosas postales pedaleando por la orilla del embalse. Todo era muy chulo, hasta que a la altura de la presa seguimos la senda en vez de seguir por la carretera asfaltada. Nos metimos por unas pendientes imposibles con mucha piedra suelta, por donde hasta resultaba difícil caminar. Nosotros con nuestro rollo gravel sufrimos demasiado y nos quedamos sin agua. Por suerte en Nanclares de Gamboa, pillamos una fuente y recuperamos fuerzas.
Nuestra próxima referencia fue la pasarela de Azua que cruza el embalse y reduce el recorrido. A partir de ahí un camino de tierra bien firme, a la sombra entre árboles y llano nos dio diversión de lo lindo. Se podía rodar rápido en un recorrido gravel genial y emocionante. También es verdad que a esa hora no habían senderistas, y pudimos entregarnos al dios de la velocidad con toda nuestra fe. El fallo es que al final había una playa fluvial llena de gente, y como no llevábamos bañador, no pudimos bañarnos. Para regresar a Vitoria simplemente deshicimos el camino de ida.
ANILLO VERDE DE VITORIA
Vitoria está rodeada por parques y zonas verdes que se pueden enlazar por un camino señalizado y arreglado. Es lo que se llama el Anillo Verde de Vitoria. Una señal con tres puntos marcaba el recorrido, que es muy fácil a nivel de desnivel y con una distancia de unos 35 kilómetros. Nada más salir del camping comenzamos a ver señales, y lo hicimos en el sentido contrario a las agujas del reloj. El motivo es que hacía el final íbamos a encontrar el tramo este de la vía verde del tren vasco navarro, y según las sensaciones, estirar por ese lado el recorrido.
Cerca de la fábrica Mercedes estaban en obras y nos obligaron a dar un rodeo. Aun así era muy chulo ver a gente paseando y pedaleando por un entorno tan agradable, que te hacía dudar de estar en una ciudad. Siguiendo la margen del río Zadorra, nos alejamos de la ciudad. En un momento dado, nos perdimos un poco entre las señales y el track que llevábamos, para llegar al parque de Salburua, uno de los más grandes. Ya luego entre carriles bici, y parques urbanos llegamos hasta un punto donde cruzamos la vía del tren y encontramos señales de la vía verde del tren vasco navarro.
VÍA VERDE DEL TREN VASCO NAVARRO
Localizada la vía verde y con gasolina en las piernas decidimos hacer un trozo. Saliendo de Vitoria dirección Estella, la vía verde del tren vasco navarro está muy arregladita. En cuanto le dejan se convierte en una línea recta, entre campos de secano, y diminutas pedanías. El paisaje no era la leche pero habían ganas de hacer kilómetros. El problema es que era hora de comer, y no llevábamos comida…ni mapa de la vía verde. Por eso paramos a comer de mesa y mantel en un restaurante en Andollu.
Tras la comida la planicie alavesa se llenó de nubes muy bajas que lo rodeaban todo. Tuvimos que tomar una decisión y tomamos la correcta: volver al camping. La lluvia era fina pero por momentos cogía mucha fuerza. Haciendo trampas varias veces, nos tuvimos que esconder varias veces del chaparrón. Una vez en el pórtico de una iglesia y otras bajo puentes. La idea era haber terminado el anillo verde para regresar al camping. Pero el agua nos forzó a buscar el camino más rápido y directo. Llegamos aceptablemente mojados, y durante el resto de la tarde la lluvia no dio tregua.
Estas son algunas de las propuestas para conocer en bicicleta Vitoria, y alrededores. Se nos quedaron algunas más en el tintero (como la del mapa), pero prometemos volver a conocerlas de otra forma. La vía verde del tren vasco navarro es muy larga y se puede combinar con bus que te lleva de Vitoria a Estella (o al revés) a ti y las bicis. Espero que te hayan gustado esta crónica y que la compartas en redes.
DORMIR EN VITORIA-GASTEIZ
Son muchas y atractivas las opciones para alojarse en Vitoria. El camping donde nos quedamos estaba un poco lejos del centro, con lo que a la próxima, nos quedaremos en algún lugar más céntrico.